Si planeás viajar a Mendoza en estas vacaciones de invierno en esta nota te contamos todo lo que tenés que saber al momento de empacar tu equipaje.
Lo más importante de recordar al momento de prepararse para el frío en Mendoza es adoptar la técnica de la cebolla: vestirse en capas. En otras palabras, no optar por una sola prenda gruesa, sino utilizar varias capas más delgadas que te puedas ir quitando a lo largo del día. De esa manera, las prendas imprescindibles en tu valija van a ser remeras de manga larga, algún buzo o sweater y una buena campera gruesa. Tampoco pueden faltar pantalones largos (de cualquier tipo de material) y unas calzas abrigadas.
Una buena estrategia para aquellos friolentos que no quieren usar demasiadas capas son las prendas térmicas, una alternativa liviana que asegura el aislamiento del frío de la intemperie durante todo el día. Además, se puede optar por accesorios tales como gorros, guantes y bufandas, que suman una capa más de calidez en los helados días de invierno.
Por último, no debemos olvidarnos del punto más débil para aquellos que sufren el frío: los pies. Un buen calzado es infaltable para visitar el suelo mendocino, y debe que no solo sea abrigado, sino que tenga en cuenta la rugosidad del territorio montañoso.
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